- Equipo Satelite
Conozca las principales amenazas que atacan la seguridad de identidad y cómo protegerlas.
Actualizado: 10 ago 2021
Su información personal es un bien valioso. No solamente es la llave de su identidad financiera, sino también la de su identidad en línea. En el siglo XXI, es indispensable saber cómo proteger su información y su identidad.

La presencia de las empresas en el mundo digital es innegable en esta época, ‘si no estamos en la red no existimos’. Sin embargo, olvidamos que al exponer la información de nuestra organización al mundo, debemos cuidar aún más su imagen y reputación.
El Internet tiene un efecto multiplicador, lo que hace más complejo controlar la crisis y su impacto. Es por ello que debemos considerar la gestión de la identidad corporativa y la reputación online como importante para nuestra empresa.
¿Cuáles son las principales amenazas?
Suplantación de identidad
Registro abusivo de nombre de dominio
Ataques de denegación de servicio DDoS
Fuga de información
Publicaciones de información negativa por terceros
Utilización de derechos de propiedad no consentida
¿Cómo proteger nuestra identidad digital?
El robo de identidades digitales es uno de los ciberdelitos más frecuentes.
Si te roban tu identidad digital, además de que el ciberdelincuente puede acceder a tus cuentas bancarias o realizar compras en tu nombre, también puede dañar tu reputación en las redes sociales.
Para proteger tu identidad personal en la red, primero debes de ser muy consciente de que el robo de identidades digitales está a la orden del día. Mañana podría pasarte a ti.
Y segundo, es muy recomendable que pongas en práctica los siguientes consejos:
No utilices redes wi-fi desprotegidas o públicas Las redes wi-fi gratuitas, que ofrecen en bares, restaurantes o cafeterías, o las redes wi-fi públicas no suelen tener cifrado WPA o WEP, con lo cual no son seguras.
No utilices páginas web desprotegidas Enlazando con el punto anterior, y a pesar de que puedas estar usando una wi-fi privada, también es importante que sólo navegues por páginas web que utilicen el protocolo https (Protocolo Seguro de Transferencia de Hipertexto).
Utiliza contraseñas seguras y cámbialas regularmente Para todos quienes tenemos conocimientos básicos de informática, las contraseñas son nuestro principal recurso para proteger nuestra identidad digital. Y quizás no les damos la relevancia que tienen. Las contraseñas seguras deben tener como mínimo 16 caracteres, combinar mayúsculas, minúsculas y caracteres alfanuméricos. Y no se debe utilizar la misma contraseña para dos servicios distintos.
Actualiza tu software regularmente Tanto si utilizas Windows como Mac, los sistemas operativos se actualizan con cierta frecuencia. Cada vez que se lanza una nueva actualización de software, aparece un aviso en tu ordenador que te pregunta si quieres proceder a actualizarlo.
Repasa los permisos y las políticas de privacidad Todas las redes sociales que utilizas tienen su política de privacidad, y actualmente todas te permiten que controles lo que quieres que se publique sobre ti.
La relevancia de gestionar y asegurar la identidad online de las personas naturales, empresas y dispositivos ha crecido debido al vertiginoso proceso de digitalización de la sociedad, la industria y las administraciones públicas. Los sistemas de gestión de la identidad y acceso online a empresas y organismos públicos son una piedra angular para el desarrollo de modelos de negocio para los ciudadanos, así como para la prevención de intrusiones en los sistemas de información como primer paso de ciberataques. Proteja el acceso a través de cualquier dispositivo, en cualquier lugar y en el momento adecuado, con el conjunto más completo y flexible de capacidades de seguridad de la identidad de Cyberark que adopta y protege una tecnología avanzada y ofrece experiencias de cliente basadas en la confianza, a la velocidad que exige tu negocio negocio, visite nuestra página https://www.satelite-ec.com/cyberark si necesita mayor información sobre la solución de ciberseguridad que más cuide a su empresa.